Habréis visto que he cambiado la imagen del blog, pero no es la definitiva. Cuando lo abrí lo hice rápidamente con una de las plantillas que te da Blogger y he ido montándolo sobre la marcha con lo que había y hay cosas que no me convencen y que quiero arreglar. Desde luego si esto es posible es gracias a mi buena amiga Carmen que sabe un montón de este mundillo blogueril y que es la que realmente lo está haciendo todo, yo solamente digo: si me gusta, no me gusta, ponle esto, ponle lo otro, ja, ja. MUCHAS GRACIAS CARMEN.
Bueno a lo que vamos, hice estas berenjenas para llevarlas a casa de mis amigos Ana e Iván que tienen un maravilloso apartamento en la playa, y cuando digo en la playa es porque está en la mismita arena. Una gozada, y en esta terracita nos las comimos.
INGREDIENTES:
Para la bechamel:
1/5 l. de leche
5 cucharadas de harina especial para croquetas y bechamel SANTA RITA.
35 gr. de mantequilla
Sal.
Nuez moscada.
Para las berenjenas rellenas:
1/2 l. de bechamel.
4 berenjenas hermosas.
2/2 kg. de magro de cerdo picado.
2 cebollas tiernas.
Queso rallado (yo puse enmental)
Sal.
Pimienta negra.
Aceite de oliva virgen.
Partimos las berenjenas por la mitad, le hacemos unos cortes en la carne, salamos, echamos un chorrito de aceite y metemos en el horno a 180 º durante unos 30 min. o hasta que la carne este blandita. Sacamos la carne de la piel que reservaremos en una bandeja de horno y picaremos la carne de la berenjena que también reservaremos para más tarde.
Mientras se asan las berenjenas hacemos la bechamel. En una olla derretimos la mantequilla con cuidado de que no se queme y le vamos añadiendo la harina poco a poco tostándola un poquito,antes de que tome color vamos añadiendo la leche templada poco a poco y sin para de remover con las varillas, salamos y ponemos nue moscada al gusto. Cocemos a fuego medio durante unos 8 min. Reservamos.
Ahora le toca el turno al relleno. Picamos las cebollas y las pochamos en una sartén con aceite, sal y pimienta. Cuando la cebolla está bien pochada subimos el fuego y sofreímos la carne picada, cuando cambia de color incorporamos la carne troceada de las berenjenas, y por último la mitad de la bechamel. Cuando todo esté bien mezclado lo sacamos del fuego y rellenamos las cáscaras de las berenjenas que habíamos reservado. Cubrimos con el resto de la bechamel y espolvoreamos con queso rallado. Cuando nos dispongamos a comerlas las gratinamos en el horno hasta que el queso esté doradito.
Es un plato estupendo para preparar la víspera, yo las hice la noche anterior pendiente claro está del gratinado, y al dia siguiente un ratito en el horno y a comer.
Si como a mi os sobra un poquito de relleno y de bechamel no lo tireis. Guardarlo en la nevera y en un par de días os digo lo que hice.